August 7, 2019 1000 PM
Por David Domínguez
David Domínguez es residente de Marfa, nacido y criado en Alpine, Texas. Trabajó en la construcción e hizo la distribución local para The Big Bend Sentinel. El 12 de junio de 2019 le diagnosticaron linfoma no Hodgkin de etapa IV. Cuenta su historia en esta nueva columna.
A medida que avanzas por la vida, con sesenta y pocos años, piensas que puedes levantar el mundo.
Una visita al médico –la primera en 33 años– y se detiene toda tu vida.
¿Quién? ¿Tú? Únete al “Club C.” Era el destino. Tus dos hermanos fueron miembros titulares.
Te pusieron tubos y te metieron en tubos. Todas las pruebas en tubos, literalmente. La sangre sacada, los tubos conectados a ti.
Y luego todo se reduce a sentarte en la Sala Triste. Regla número uno para los miembros del Club C: puedes sentarte en la Sala Triste.
Hoy hiciste un viaje de Club a la Sala Triste: cada miembro del Club C puede pasar su tiempo allí. Nadie sonríe en la Sala Triste, nadie te mira. Todos están en la misma situación.
¿Cómo será la Sala Triste cuando entras allí de verdad? ¿Qué piensas? ¿Tienes miedo? La Sala Triste está allí para ayudarte, eso dicen.